En 2018 jugué Frostpunk y casi no dormí un fin de semana. Esa reseña la pueden leer acá. Ahora ya pude probar el DLC: Frostpunk The Last Autumn y aquí les cuento qué me pareció.
De qué se trata Frostpunk The Last Autumn
Si recuerdan Frostpunk es un juego de administración de recursos, en el que estás en el fin del mundo (ocasionado por una helada) y tienes que sobrevivir únicamente con la energía de un generador con base en carbón.
Ahora, en The Last Autumn te encuentras un poco antes del fin del mundo, como su nombre lo indica, un momento antes de que comience la terrible nevada que empujará a la humanidad casi a la extinción. ¿Tu trabajo? Construir ese generador que bien podría salvar al mundo. Sin embargo, la tarea no será fácil.
Cómo se juega
El gameplay es muy similar al juego base. Así, tendrás que recolectar recursos como carbón, hierro y madera, así como mantener a tus ciudadanos alimentados y con hogar, y sobre todo felices.
Como este juego se sitúa antes de la gran helada, a muchos trabajadores la premura de que llegará el fin del mundo todavía no les preocupa, y están más consternados con tener buena alimentación y no aburrirse; de igual modo, ya que aún no comienza la helada, mantenerlos calientes no será una prioridad (al menos no al inicio).
Algo que cambia es la construcción del generador, ya que tengas los recursos necesarios, tendrás que construir cada parte del generador, y ésta es una tarea monumental. No sólo necesitas muchos recursos, sino también muchísimos trabajadores. Además, construirlo es peligroso y habrá accidentes que quizá puedas o no evitar.
Así, hay un nuevo indicador: la seguridad, que tendrás que tomar en cuenta al trabajar en el generador. Entre las precauciones de seguridad, está el construir una planta que filtre los gases nocivos que emanan del fondo de la tierra. Por lo que… aunque parecería que no necesitas carbón para este DLC (después de que es vital en el juego principal), oh sorpresa, sí lo necesitas. El carbón mantendrá funcional la planta de filtración.
Hay 4 momentos clave para la construcción del generador, y cada una necesitará más recursos y más gente, ah y claro, tendrás que cumplir tu cometido con el deadline establecido por el gobierno o si no… te corren. Así sin más.
Otra cosa que cambia son las leyes que puedes poner en práctica para que tu poblado no se te salga de control. En el Frostpunk clásico, la decisión más grande era entre gobernar con un puño de hierro (muy dictadura fascista) o con la religión como aliado. Aquí, la decisión está entre escuchar a tus ingenieros o a los trabajadores. Ambos son vitales para la construcción del generador, pero ¿quiénes serán mejores líderes?
Probé el juego con los dos caminos, y la verdad es que ambos terminan en cosas bastante drásticas. Por ejemplo, en la visión de los ingenieros, puedes hasta hacer una separación por clases y darles mejores casas a los ingenieros, mientras que los trabajadores siguen viviendo en tiendas.
Te-rri-ble.
Mientras que del lado de los trabajadores, la última ley tiene que ver con eliminar a los enemigos de la gente, es decir ejecuciones. No chill at all.
Lo que sí es que no podrás conseguir construir el generador sin el apoyo de alguno de estos dos grupos. Las leyes te ayudarán a subir la motivación, pues ésta disminuye día con día, y sólo con ella en alto, los trabajadores lograrán darlo todo por el generador.
No obstante, en el fin del mundo, es difícil encontrar la motivación para seguir trabajando, aún cuando hay una casa de placer en el pueblo.
Y si no los motivas… se van a huelga. Éste es otro de los conflictos que tendrás que resolver, y a veces implicará gastar recursos (como comida) y otras veces implicará darles nuevos edificios para descansar (como un baño). Lo peor que puede ocurrir es que tengas que darles el día libre y entonces… se pase tu deadline.
Lo mejor
Sin duda, lo mejor del DLC es que el conflicto sigue siendo interesante y complicado. Al final, tal vez sí lograrás sobrevivir y construir el generador, pero ¿con qué costo moral? y ¿cuántos tendrán que morir por ello? Como balanceas eso es la parte más interesante del gameplay de Frostpunk.
A mí, por ejemplo me cuesta mucho trabajo llegar a las últimas leyes, aún cuando sé que mi vida sería más fácil sólo aplicándolas. Por ejemplo, si hubiera elegido segregar por clases, cuando llega la helada (porque obviamente llega para el final del DLC) los ingenieros habrían tenido casas cómodas y que se mantendrían calientes, disminuyendo así el descontento. Sólo que no fui capaz de hacerlo.
Lo malo
En realidad no es súper malo para mí, pero si Frostpunk te parece poco retador, no vas a encontrar el reto aquí. El DLC es considerablemente más sencillo que el juego base, sobre todo si ya has jugado por horas y horas como yo.
En fin, se los recomiendo mucho, sobre todo si les gustan los juegos de administración de recursos y obviamente si necesitaban más Frostpunk.
Checa nuestro stream de Frostpunk The Last Autumn: